3/13/2014

El sueño de Cobie Steketee



Como Martin Luther King , yo también tuve un sueño, ¿quién no lo ha tenido alguna vez? Soñé que un día nuestro refugio tendría suelos nuevos  y paredes pintadas con colores bonitos para que los perros fueran más felices; que cada patio tendría una palmera que diese a los perros  sombra en verano y quitase viento en invierno; que habría un lugar especial para galgos traumatizados donde pudieran sentirse seguros , tal vez con una música suave de fondo; que  habría una pequeña clínica para aquellos que necesitan tratamiento; que el gran terreno junto a las perreras tendría mucha hierba verde donde los perros podrían correr y jugar todo el día; que habría calefacción en los criaderos en invierno, etc., etc.  Scooby sería un pequeño paraíso, para las personas y para los animales.
Pero lo primero que necesitamos para esto es el dinero y la realidad es que muchos de nuestros clientes no se molestan en pagarnos los servicios prestados. Como la Fundación Luna de Salamanca, que nos dejaron muchos perros aquí y desde hace más de un año nos deben  4700, - euros! O la asociación alemana ACM, que también ha dejado muchos perros aquí y nos deben unos 7.000, - euros desde hace más de 2 años! O una persona particular, que dejó a sus 2 perros, ambos mayores de 10 años, dijo que los dejaba  sólo 4 meses y lloraba cuando lo hizo porque los quería mucho y decía que iba a venir a visitarlos todas las semanas. Nunca volvió, ni tampoco el dinero que nos debe! Un galguero de Madrid nos dejó a sus 3 cachorritos de galgo, nunca pagó nada y nos debe 1.700, - euros, que no quiere pagar. Quiere muchísimo a sus perros, pero ya se ha olvidado de ellos! Si no paga lo que debe, no le devolvemos los perros y estos cachorros, -mientras tanto de casi 2 años-, están en nuestra página de adopción. Qué afortunados! Varios otros galgueros no pagaron la factura y por lo tanto no pueden traernos más perros, lo que por supuesto nos hace sentir muy, muy mal por los pobres animales, ya que sin lugar a dudas, ellos estarían aquí mucho mejor que con los galgueros. Es una cuestión de educación, creo... ¿Y nosotros? Seguimos soñando... con palmeras bajo el sol, bonitos suelos y paredes pintadas de colores, calefacción, clínica, la hierba verde... en fin, dulces sueños... !