Charlie y
Amélie fueron salvados de una muerte segura, su "dueña"
quería sacrificarles
como para quitárselos de encima como si se trataran
de cualquier
objeto de usar y tirar. Ellos estaban en cuellar y no nos lo
pensamos ni
un momento a e intervenimos para salvar sus vidas.
Su vida no
fue muy buena, nunca les habían dado cariño antes de llegar
a Scooby y
probablemente les hayan pegado ya que cuando les va a acariciar alguien a
quien no conocen, se agachan acongojados con el rabo entre las patas....
Pero a pesar de todo lo que han sufrido son muy mimosos y están deseosos de
dar ese cariño incondicional. Son muy falderillos y ahora que
saben lo que
es el afecto se pegan a ti para recibir mimos contantes.
Les hemos
enseñado a andar con correa, ya que nunca antes se había
molestado
nadie en prestarles la suficiente atención como para sacarles
de paseo, ¡y
ahora les encanta!. También han aprendido a subir y bajar
escaleras,
cosa que les daba auténtico pavor, y empiezan a responder a
sus nombres.
¡Aprenden muy rápido!
Como llevan toda
su vida juntos y han sufrido por igual el uno junto al
otro, se
protegen mutuamente y lo pasan muy mal cuando están separados. Se sienten
seguros si están juntos y si hay algo que les da miedo se ponen a
tiritar y se
juntan mucho más como
si así pudieran evitar lo malo que les
pueda pasar.
A pesar de
que han vivido toda su vida fuera de casa, en casa no ladran, son muy
tranquilos y, sorprendentemente, no hacen sus necesidades
dentro ni destrozan
nada, se adaptan muy bien a un hogar y conviven perfectamente con otros
perros, con gatos y con niños.
Ellos ya han
sufrido bastante a lo largo de su corta vida, ahora buscan un
hogar donde puedan dales la
oportunidad que se merecen, quieres ser tu?
