Lily es una pequeña gatita bicolor, blanca y negra, es educada y dócil, cariñosa y
mimosa, juguetona y muy, muy bella, podríamos decir que es la princesita de la
Protectora.
Es muy tranquilita, se pasa el día echada en su cestito durmiendo al son de su ronroneo,
ronron... ronron..... posiblemente soñando con que su príncipe azul venga pronto a
rescatarla de su encierro, soñando que ese príncipe luchará con todas aquellas personas
crueles y malvadas que dejan en manos del destino a tantos y tantos gatitos como ella y
que por fin la salvará y la llevara con él a un lugar encantado donde será feliz para
siempre.
Pero cuando su sueño termina y Lily despierta vuelve a verse encerrada.
Se ha vuelto algo perezosa porque la verdad es que no tiene muchos entretenimientos.
A pesar de su corta vida Lily ya ha sufrido mucho, fue abandonada y por si eso fuera
poco a causa de una herida y una infección perdió uno de sus preciosos ojitos, en algún
momento de su recuperación pensamos que la perdíamos pero Lily fue fuerte y tenía
tantas ganas de vivir que lo superó, por eso merece estar en un lugar mejor, un hogar
donde vivir como la princesa de cuento de hadas que es, donde tenga sitios para
esconderse, ventanas donde asomarse, radiadores donde arrimarse en los fríos días de
invierno y sobre todo almohadas donde acurrucarse al son de su ronroneo,
ronron...ronron... sabiendo que sus sueños por fin se han hecho realidad.
De Nieves Vázquez
