Dante siempre está excavando, excavando, y venga excavar... Pero, ¿hacia dónde?
Pues está excavando un camino a un hogar que él sabe que debe estar por ahí en
alguna parte. Dante ha estado excavando todo este año y ya empieza a cansarse. Quiere creer que un día llegará allí, a su casa para
siempre, aunque después de tanto tiempo está empezando a desanimarse. ¡Por
favor, no dejes que se dé por vencido y dale un hogar dulce donde excavar!
Además Dante es un amor. Es un macho negro de tamaño pequeño con una piel que nos
cuenta la dureza de su vida porque está lleno de cicatrices. Pero a Dante no le
importa, él sólo mira hacia adelante. Es feliz, ama a la gente y le gusta jugar
con sus amigos. Tiene casi 5 años de edad.