Hace unos días se ponían en contacto con Scooby desde
Mérida para que les ayudáramos con el caso de una galga que habían
recogido con una pata completamente infectada. Obviamente Scooby dijo que no
había ningún problema y que nos hacíamos cargo de ella. Gracias a un transporte
solidario financiado por varias personas, Estrella, que es así como se llama
esta preciosidad, llegó a Scooby el martes por la mañana. Rápidamente nuestros
veterinarios la realizaron un estudio y comprobaron que la infección de
su pata está muy avanzada en un inicio de gangrena. En estos momentos se la
están suministrando antibióticos y calmantes, y está en observación para ver
cómo va evolucionando y cuál será el siguiente paso a seguir.
Gracias a gente tan maravillosa como sus salvadores
Estrella puede tener una nueva oportunidad porque estamos seguros que pronto
encontrará un hogar donde vivir la vida que se merece.