8/05/2014

'cementerio' de perros entre Tudela y Herrera




 Restos de uno de los perros, con collar pero sin chip / Nuria Nieto
 
Asociaciones de animales denuncian la existencia de un 'cementerio' de perros entre Tudela y Herrera
  • El pinar en el que están enterrados al menos 10 canes afecta a la salud pública y al medio ambiente
  • j. fernández | tudela
2 agosto 201419:33
Ya en abril fue la sociedad protectora de animales ‘Scooby’ la que denunció la existencia de varios cadáveres de perros enterrados en un pinar situado al lado de la carretera que discurre entre Tudela y Herrera de Duero. Cuatro meses más tarde, ante la «pasividad» de la Guardia Civil y las autoridades judiciales -no se han abierto diligencias todavía- ha sido la Asociación Animalista Libera la que de nuevo ha denunciado la aparición de un ‘cementerio’ con más cadáveres descuartizados de perros de distintas razas y tamaños, principalmente de caza y de razas peligrosas de presa como pitbulls y bulldogs.
Esta vez, ante la presencia de un agente del Seprona en la zona, Nuria Nieto, de la Delegación en Castilla y León de la Asociación Animalista Libera, exige que se realice un seguimiento del caso y se investigue la procedencia de estos perros, cuyos cráneos y huesos de distintas extremidades están escondidos y repartidos por todo el pinar.
Más allá del abandono y el maltrato animal evidente, el macabro hallazgo afecta a la salud pública de las personas que transitan por el entorno y al propio medio ambiente. «A primera vista habría por lo menos diez perros muertos y no me puedo imaginar lo que podría haber allí si excavamos más. Tiene que estar lleno de animales enterrados. Puede que sean perros robados que se utilicen para peleas que se realicen en la zona porque es muy raro que haya tantos restos de perros muertos en el mismo sitio», comenta Nuria Nieto.
Desde Dignidad Animal Vallisoletana -otra de las protectoras que se ha hecho eco del tema- José Luis Aguilar, apunta a que el caso también podría esconder una supuesta red de economía sumergida debido a que «podría tratarse de personas particulares que se dediquen irregularmente a la recogida y el posterior enterramiento de perros que sus dueños ya no quieren».
Al no llevar chip identificativo es muy complicado encontrar a los propietarios, por eso piden a las autoridades que se investigue lo sucedido en la zona.
Es importante conocer que a los perros solo se les puede sacrificar cuando están enfermos y por las vías legales como es la inyección que les pone un veterinario y la posterior incineración del cadáver.